El primer paso clave para que tu maquillaje luzca perfecto es preparar el terreno. Si tu piel está liberada de toxinas, hidratada y nutrida el resultado no solo era perfecto, sino también duradero y evitarás estar pendiente de los molestos retoques. Por eso, debemos empezar por una limpieza en profundidad, tras la que aconsejo activar la microcirculación empleando un mini guante de silicona. Contiene puntas redondeadas que preparan la piel para que los principios activos que emplees a continuación penetren mejor. Purifica y limpia, reforzando la elasticidad de la piel y consiguiendo el efecto de suavidad que estamos buscando. Si además realizas un un masaje ascendente, estarás reafirmando, elevando pómulos y definiendo el óvalo facial. Con un masaje de pinoteamiento en la zona de ojos, reducirás también bolsas y estarás preparando el camino para que el maquillaje sea perfecto. A continuación aplicaremos cosméticos que eviten la deshidratación y mantengan tu piel jugosa.

Si tienes tiempo, te recomiendo que te sumes al truco de los maquilladores de estrellas como Julia Roberts. Aplica una mascarilla tipo tisue, de hidrogel o celulosa, con una elevada concentración cosmética que aportará jugosidad y confort. No olvides que también te servirá de prebase consiguiendo que luzcas perfecta durante horas.
Otro aspecto clave es elegir maquillajes saludables para tu piel con el fin de evitar que surjan brotes de dermatitis o reacciones alérgicas, más comunes de lo que imaginamos. Escoge aquellos que están testados dermatológicamente o que son hipoalergénicos.
Si quieres asegurar la excelencia de tu make up, nada mejor que realizar un tratamiento en cabina, al menos una vez al mes, con el fin de retirar impurezas y células muertas. Las pieles fatigadas notarán especialmente ese aporte de oxígeno y luminosidad, intensificando el resultado del maquillaje final. Y no olvides que, además, estarás regalando a tu piel un tratamiento anti estrés muy recomendable para comenzar la temporada.