Sumergirse en una bañera de espuma, con sales y unas gotitas de aceites esenciales, es un placer que griegas y romanas practicaban a modo de ritual de belleza; incluso añadían leche de burra para mantener su piel tersa y suave. Lo que hoy os propongo, es disfrutar de estos días de descanso que esta semana de comienzos de diciembre nos regala. Tanto si te quedas en casa como si aprovechas para hacer una escapada, busca el momento para diseñar tu propio spa con los baños de belleza. Además de ayudarte a mimar y cuidar tu piel y tu cabello, te servirá como cura para relajar musculatura y aliviar tensiones o combatir la fatiga.
Cómo preparar tu baño de belleza
El primer paso fundamental es preparar el escenario. ¿La temperatura ideal? Entre 22 y 24 grados; el agua mejor cálida, sin excedernos en la temperatura y la iluminación, indirecta – las velas aromáticas son perfectas o las luces que te permiten regular la intensidad-. Por supuesto, no dejes de escoger la música que más te relaje y que encaje con tus gustos.
En el agua te aconsejo que añadas unas gotas de un gel que hidrate y añádele un toque de aceite esencial. El favorito en nuestros centros y por el que tanto nos preguntáis es de lavanda. Recuerda que sus propiedades son infinitas. Sus beneficios son conocidos desde la antigüedad ya que es capaz de aportar desde hidratación hasta nutrientes, tonificar, estimular y en general mejorar el aspecto de nuestra piel. Como es sabido, en nuestros centros cuidamos al detalle la relajación y el bienestar de quién se pone en nuestras manos. Y la lavanda es un imprescindible en ese ritual debido a sus propiedades aromáticas y relajantes. Con su aroma conseguimos llevar a la relajación de nuestros clientes, algo fundamental a la hora de disfrutar del tratamiento.

Pero si prefieres otros aromas, adelante. En cualquiera de sus versiones, las texturas oleosas se han convertido en compañeras insustituibles en nuestros neceseres cosméticos. Los motivos por los que resultan ideales a la hora de recuperar el tacto sedoso y la hidratación son varios: no incluyen surfactantes agresivos que sí incorporan algunos geles de baño, regeneran y, además, cubren a la perfección la función de la crema hidratante ahorrándonos este paso final cuando el tiempo apremia. Lo que sí aconsejo es elegir aquellos capaces de hacer diana en las necesidades puntuales que cada piel necesita.
Mejor si te sumerges y aprovechas ese momento para colocar una mascarilla regeneradora o porqué no, pruebas uno de los últimos gadgests domésticos capaces de devolver a tu mirada sus años de juventud. Con Unictech Eye Mask conseguirás en tan solo unos minutos reducir bolsa y ojera, minimizar patas de gallo y aportar ese extra de luz que tanto rejuvenece.
Aprovecha tu baño de belleza para exfoliar
Es también el momento ideal para exfoliar tu cuerpo con un scrub suave y ayudándote de un guante de crin o silicona. Dentro de poco llegará el momento de lucir escote y brazos con los trajes de fiesta que tenemos preparados. El peeling de Cellcosmet BodyGommage-XT es tu aliado perfecto porque su textura untuosa te ayudará a eliminar las células muertas y las impurezas cutáneas. Purifica y aporta una sensación de bienestar inigualable. Un capricho que puedes completar en nuestros centros de belleza con cualquiera de nuestras experiencias de bienestar. Además de disfrutarla verás aliviados dolores de cabeza, molestias cervicales, y cualquier dolencia derivada del estrés. Ideal para aguantar el tirón navideño que nos espera a la vuelta de la esquina.